12 noviembre, 2010

'Friday Night Lights' apunta a final galáctico

La última vez que escribí sobre 'Friday Night Lights' aún me encontraba en el ecuador de la tercera temporada, metido de lleno en mi particular maratón con el objetivo de llegar a tiempo al estreno de la quinta y última temporada.


Un mes después aquí estamos de nuevo, con la última tanda de episodios ya en marcha, y con unas sensaciones inmejorables ante el inminente final de la serie. Porque como ya es costumbre, Dillon nunca decepciona...


Como ya es bien sabido, la cuarta temporada de la serie supuso para ésta un importante lavado de cara, en cuanto a personajes y en su defecto, en cuestión de tramas. Personajes muy queridos como Lyla, Tyra o Jason Street decían adiós a la serie; y otros como Matt Saracen estaban a punto de hacerlo. Y no puedo dejar pasar la oportunidad de hablar de la forma en que despiden a los personajes en esta serie.

La primera realmente importante fue la de Smash Williams, de la que ya hablé en la entrada anterior sobre la serie. Luego le tocó el turno al malogrado Jason Street, al que por fin después de todo el calvario vivido le sonrió la vida permitiéndole formar una familia. Y por último, en esa fantástica tercera temporada, le llegó el turno a Lyla y Tyra, ambas abandonando Dillon para emprender sus carreras universitarias, dejando atrás gran parte de sus vidas, Landry y Riggins incluidos.


Ante salidas tan sonadas, era lógico y necesario que llegaran nuevos habitantes a la serie, no para ocupar el lugar dejado por los personajes anteriormente citados (cosa que hubiera sido un gran error) pero sí para seguir abasteciendo lo suficiente a la serie de historias interesantes. Y así fue. Llegaron Vince, un potencial delincuente con mucho talento; Luke, un chico exageradamente encantador y agradable (todos somos Luke); Jesse, una chica que adora el fútbol y con una historia detrás con Vince; y la adorable Becky, de la que se podría decir que es la versión femenina de Luke, y cuya incorporación sirvió para ver a un nuevo Tim Riggins.

Hablando de Tim Riggins, fue una de las despedidas (parciales) que nos dejó el final de la cuarta temporada. Aún habiendo dado un gran giro a su vida y al modo de encararla, no pudo evitar meterse de nuevo en problemas, esta vez (una vez más) por culpa de su hermano Billy, del que sigo diciendo que es el sinvergüenza más entrañable de toda la serie. Sinceramente, no esperaba ver a Riggins tan alejado de la serie (hasta ahora solo ha salido un par de minutos en la Premiere de la quinta) por lo que encontrarme a Taylor Kitsch fuera del reparto principal de la serie me sorprendió bastante.


Otra gran despedida sonada fue la del querido Matt Saracen, quien se encargó de cerrar (muy merecidamente) la cuarta temporada. Pero incluso actúar como actor invitado dicha temporada no nos privó que el personaje nos dejara momentos e imágenes inolvidables para la serie, como fue por ejemplo el antológico 'The Son', quinto capítulo de la temporada, y que nada más y nada menos estuvo compitiendo en la pasada edición de los Emmys por hacerse con el premio a mejor episodio. No lo consiguió, pero... ¿alguien a estas alturas le sigue dando importancia y credibilidad a esos premios? De cualquier forma, fue otro adiós muy agridulce, dejando atrás también a las personas más importantes de su vida.

En fin, que tras otra excelente temporada como fue la cuarta, la expectativas (como bien indicaba el título del 5x01) para la que sería la última estaban, como era de esperar, bastante altas, y con tres capítulos de ésta ya a nuestras espaldas, creo que no hay nadie ligeramente decepcionado. En esta temporada apuestan acertada y claramente por la continuidad de las tramas e historias desarrolladas en la anterior, con los Taylor al volante (como no podía ser de otra forma), y con secundarios como Vince, Julie o Luke tomando la alternativa cuando es necesario, haciendo que la serie en ningún momento cojee, incluso prescindiendo de los servicios del mítico Landry (qué grande su adiós a la serie), uno de los personajes más adorables que jamás he tenido la oportunidad de ver en una serie.


Hasta cierto punto, tanto la cuarta temporada como el inicio de la quinta recuerdan ligeramente a la primera, en el sentido de todo lo que rodea a los Taylor y su trabajo. En la ya mítica temporada de arranque de la serie, veíamos como todo giraba alrededor de los Taylor, y como Eric tocaba el cielo -después de importantes adversidades- junto a los miembros del equipo (ay los Panthers...), tanto dentro del campo como fuera.

Decía que en cierto modo guardan similitudes porque todos vimos cómo estaba la situación en East Dillon cuado el Coach puso por primera vez un pie en aquellas ruionosas instalaciones en aquella emocionante e inolvidable escena final de la tercera temporada, la cual nos dejó una imagen para la posteridad de la serie. Como era de esperar, la cosa no iba a ser fácil, y en ciertos aspectos, la cuarta temporada sirvió como un periodo de tiempo de transición para todo lo que parece que acontecerá en esta última. Desde la llegada y la resurrección de los Lions, el este de Dillon es un lugar mucho más presentable. Hay ilusión y esperanza para la zona marginada de ese pueblo magnético, y todo apunta a que desembocará en algo tan maravilloso a lo que ocurrió en el final de la primera temporada, aunque teniendo en cuenta la filosofía de esta serie, casi nada es seguro, pero una cosa sí: podrán o no triunfar deportivamente, pero lo que es innegociable es que todos y cada uno de ellos saldrán inmejorablemente formados como personas.


Así pues, seguiremos muy atentos a los avances de la temporada, de la que ya solo nos quedan una decena de capítulos. Será duro despedirse de Dillon, pero todo sienta mucho mejor cuando te marchas estando arriba del todo. 'Friday Night Lights' lo está en estos momentos, y una vez más vuelve a dejar claro que en la actualidad no hay quien le haga sombra. Empieza la cuenta atrás. Diez...

2 comentarios:

  1. Casi me emociono de nuevo al recordar las despedidas de los personajes, especialmente las de Matt, por cosas como The Son, y Landry, personaje con el que es muy fácil identificarse.

    Está siendo un comienzo de temporada más tranquilo que la pasada, pero no por ello menos bueno. Momentos como la marcha de Landry o la "despedida" de Julie, la historia de Vince del último y especialmete ese "state" lo demuestran. Cuántas cosas se pueden decir con nada más que una palabra.

    Qué gran serie y cómo me gusta estar disfrutando de su última temporada al día.

    Nervioso me pongo de imaginar lo que nos tienen preparado en esta traca final.

    ResponderEliminar
  2. En los capítulos iniciales de esta serie, tengo que decir que me está gustando más que la película que hicieron dos años antes. Seguiré hablando próximamente. (Por cierto, vaya Paulie más desmejorado el de la foto).

    ResponderEliminar